La Casona

Desde hace muchas décadas los younguenses conocemos con este nombre a esta edificación que en los últimos años fue el centro de una institución educativa privada hasta el año 2023. Pero en este punto de la actual ciudad se erigió a fines del siglo XIX un comercio de ramos generales, una tradicional pulpería, apostadero de carretas y diligencias que cruzaban este territorio y posada para viajeros, un verdadero centro de reunión para vecinos que desde establecimientos rurales cercanos o de primitivas construcciones en este paraje tenían a este comercio como referencia de abastecimientos y de encuentros sociales.

Una excelente descripción de lo que significó para el comienzo del proceso fundacional esta pulpería, fue realizada por el Ing. Agr. José Pedro Oliver: “En la esquina que formaba el camino de Paysandú cuando se desviaba del camino de La Cuchilla hacia el sudoeste, estuvo instalada una importante pulpería. Comercio de ramos generales, cumplió desde mucho antes de formarse la población de Young, diversos servicios comunitarios; la vecindad de las estancias y establecimientos de la zona giró alrededor de ella y sus servicios sirvieron para estrechar la vinculación del área tributaria, configurando desde muy temprano en el tiempo, la personalidad de la zona. En tiempos posteriores, sus primitivas instalaciones fueron prácticamente demolidas en su totalidad; de su antigua construcción sólo quedan como testigos algunos elementos propios de su arquitectura: algunas rejas, corredores abiertos etcétera, que se integraron a la nueva edificación que se construyó sobre sus escombros y que actualmente es conocida como “La Casona”. Hasta 1904 será su propietario el Sr. Tur y Mari, hacendado del lugar, pasando luego a la firma Pereira, Croce y Cía”.

En este lugar se realizaban reuniones domingueras, también se abordaban por los concurrentes, temas intranscendentes como otros de gravedad e importancia para la zona, allí se creó la Liga Patriótica, que entre otras gestiones estará la creación de la primera escuela pública en el año 1899, se organizó un Sociedad Telefónica que brindará servicios desde 1909 con centralita ubicada en este comercio, será Agencia honoraria del Correo y posta de diligencias que circulaban por los caminos de la época. Su última actividad comercial se remonta al año 1914 cuando su administración estuvo a cargo de la firma Marroni, Zugasti y Cía. que precisamente a fines de ese año construyen un nuevo edificio para su comercio en un punto cercano a las vías del ferrocarril y que dará lugar a otro emblemático sito de la futura ciudad.